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Hay multitud de personas que no dan la importancia necesaria a su salud bucal. Es importante saber, en este sentido, que si no llevamos un control y cuidamos nuestra boca, el día de mañana pueden aparecer enfermedades bucodentales derivadas de una higiene incorrecta, variable que constituye, entre otros factores predisponentes, la principal causa de este tipo de patologías.
Por eso es recomendable ir al dentista una vez al año y hacerse una revisión y una higiene dental profesional.
Deste modo, nos aseguramos mantener una correcta salud bucodental y poder tener una buena calidad de vida.

¿Qué es la periodoncia?

La periodoncia es la rama de la odontología que se dedica a la prevención, al diagnóstico y al tratamiento de las enfermedades periodontales y causas que afectan al tejido del periodonto (encía, hueso alveolar, ligamento periodontal y cemento radicular).
Tu boca te está hablando cuando tus encías y dientes sufren alguna de las siguientes alteraciones:
Sangrado de encías
Sensación de alargamiento de los dientes
Cambio de coloración
Cambio de posición de los dientes
Movilidad dental
Mal aliento
Aumento de la sensibilidad
Dolor
Su salud padece de alguna enfermedad cardíaca, de diabetes, persona fumadora…
Factores influyentes en la aparición de enfermedades periodontales
Algunos de los principales factores responsables de la aparición de las temidas enfermedades bucodentales son una mala higiene, el ser fumador y ciertas enfermedades que incrementan el riesgo de padecerlas.
Dato: 8 de cada 10 adultos de más de 35 años tienen algún tipo de enfermedad periodontal.
Mala higiene bucal
Es muy importante cepillarse los dientes un mínimo de 2 veces al día, sobre todo después de las comidas, ya sea con cepillo manual o eléctrico.
También es importante usar cepillos interproximales o hilo dental, ya que previene caries y elimina la acumulación de placa bacteriana.

Por eso es tan importante que acudan y consulten a su dentista cuando tengan alguno de los síntomas mencionados.
Entre la diabetes y la salud bucodental existe una relación bidireccional, a saber: el hecho de padecer diabetes aumenta las probabilidades de tener una infección en las encías causada por un conjunto de bacterias. Dicho de otro modo, la periodontitis, así como tener una enfermedad periodontal ya diagnosticada, origina un riesgo elevado de sufrir una serie de problemas relacionados con la diabetes.

Periodoncia y diabetes, ¿cuál es la relación?
Hay más de 200 millones de personas en el mundo que padecen diabetes de algún tipo.
La diabetes no controlada produce xerostomía, infección, mala cicatrización, mayor incidencia y gravedad de las caries, gingivitis, enfermedad periodontal, entre otras.
Por eso es tan importante que acudan y consulten a su dentista cuando tengan alguno de los síntomas mencionados.
Entre la diabetes y la salud bucodental existe una relación bidireccional, a saber: el hecho de padecer diabetes aumenta las probabilidades de tener una infección en las encías causada por un conjunto de bacterias. Dicho de otro modo, la periodontitis, así como tener una enfermedad periodontal ya diagnosticada, origina un riesgo elevado de sufrir una serie de problemas relacionados con la diabetes.
Periodoncia y tabaco ¿Cuál es la influencia en el periodonto?
Para un fumador el riesgo de padecer periodontitis es tres veces mayor que el de una persona que no fuma.
Además, con el tabaco la enfermedad progresa con mayor rapidez, se dificulta su detección precoz y se limitan los resultados del tratamiento.

Razones: las bacterias pueden ser más agresivas, los vasos sanguíneos están afectados, lo que explica una peor respuesta debido a la nocividad del tabaco, los tejidos periodontales se alteran por el efecto del tabaco.
El tabaquismo no solo incrementa el riesgo de desarrollo de periodontitis, sino que también afecta de forma significativa a la terapia periodontal, tanto quirúrgica como no quirúrgica.
Por distintos mecanismos, el tabaco promueve el estado preinflamatorio que subyace a la enfermedad periodontal, altera las barreras naturales contra la infección y daña directamente las células epiteliales orales. En definitiva, la salud bucodental se ve afectada.
Periodoncia y técnicas de cepillado, claves para mejorar la salud bucal

El cepillado dental es uno de los hábitos diarios más importantes para nuestra salud. Con él, podemos hacer que disminuya la probabilidad de padecer caries y enfermedades periodontales.
Además de existir diferentes tipos de cepillos dentales, también existen diferentes técnicas para un correcto cepillado dental.
Técnica de Bass modificada
El éxito de un buen cepillado se basa en mantener una correcta técnica. Una de las técnicas más recomendadas es la técnica de Bass modificada, muy útil para pacientes periodontales.
Colocaremos el cabezal del cepillo sobre la superficie del diente, con una inclinación de 45 grados hacia la encía, e iniciaremos movimientos verticales de arriba abajo cubriendo por completo las caras externas e internas del diente.
Deberemos fijarnos que estamos llegando bien con el cepillo hasta los molares posteriores.
Cepillaremos tanto las caras vestibulares (externas), como las palatinas (interna superior) y linguales (interna inferior).
Para conseguir un correcto cepillado de incisivos, tanto superiores como inferiores por sus caras internas, deberemos colocar el cepillo en posición vertical e iniciar movimientos de arriba hacia abajo.
En las superficies masticatorias cepillaremos realizando movimientos de atrás hacia adelante.

Consejos para un buen hábito de higiene bucodental
El éxito de un buen cepillado se basa en mantener una correcta técnica. Una de las técnicas más recomendadas es la técnica de Bass modificada, muy útil para pacientes periodontales.
Enjuágate antes del cepillado con un colutorio. Si lo haces antes y no después, conseguirás eliminar muchas de las bacterias presentes en boca antes de hacer uso del cepillo
Cepíllate después de las comidas durante al menos 2 minutos (30 segundos por cuadrante)
Haz uso de pastas dentífricas fluoradas para prevenir las caries
Cambia tu cepillo o cabezal cada tres meses
No compartas nunca tu cepillo de dientes
Guarda el cepillo en un lugar seco, lejos de la proliferación de bacterias
Haz uso del hilo o seda dental (o de cepillos interproximales si así te lo recomienda tu odontólogo)
Cepilla muy bien la lengua (la lengua acumula millones de bacterias que también deben ser eliminadas para evitar, sobre todo, el mal olor)
Realiza higienes profesionales por lo menos una vez al año
¿Quieres más información?
Si tienes alguna duda sobre cualquier tratamiento dental escríbenos y nos pondremos en contacto contigo con la mayor brevedad posible.